Afortunadamente he encontrado en la red algunos que se ponen incluso más pesados de lo que yo soy capaz. Si sois del tipo de viajero que se lee las páginas de historia de las guías con estos enlaces disfrutareis (aunque ya sabéis que no hay que creerse todo lo que dicen). Si esa literatura no es de vuestro gusto, cuanto menos podéis mirar las fotos.
http://www.sofiaoriginals.com/abr628construccion5.htm
http://davidmaestre.com/2007/08/templos-de-sicilia.html
http://www.liceus.com/cgi-bin/gui/04/sicilia.asp
Aún mantengo el interés en explicar algunas cosas:
1.- La forma del orden dórico "imita" la construcción de madera
¿Adaptación a un nuevo territorio carente de árboles?
(recordar que eran "emigrantes" indoeuropeos)
¿Deseo de permanencia e inmortalidad? ¿deseo de perfección?
(esto último seguro que sí)
2.- La perfección se consigue con el uso del ORDEN, esto es, con las relaciones matemáticas que existen entre las partes de la construcción. Por eso:
- Cada orden tiene un número finito y fijo de componentes (ni se añade ni se quita nada)
- Cada elemento se asocia con un número multiplicador.
.el multiplicador 1 es el ancho de la columna (en su éntasis)
.el multiplicador 6, en el caso del dórico, es el alto del fuste
-Puesto que la forma de todos los elementos es conocida y todos ellos tienen un referente numérico, si conocemos el tamaño de un elemento podríamos reconstruir el templo COMPLETO y todas las partes guardarían la misma PROPORCIÓN entre ellas.
3.- Las diferencias entre los órdenes no son decorativas, lo que cambia son los elementos que lo componen y sobretodo la PROPORCIÓN que se da entre ellos. (no recuerdo el multiplicador del fuste jónico, pero seguro que no es 6)
4.- Aunque la teoría es muy bonita, resulta que no todos los templos son iguales eso se debe a que:
-Se dan adaptaciones locales
-Se busca la perfección:
Puesto que tenemos un sistema numérico, cualquier corrección que realiza un arquitecto queda anotada. Si resulta un acierto que mejora el conjunto, todos los arquitectos posteriores la adoptarán. Si resulta un fracaso, nadie más cometerá el mismo error.
Forman parte de la perfección
--La simetría y la exactitud
--El uso del
número aúreo porque la construcción debe someterse a la "medida del hombre"
"Midieron la
huella de un pie humano y la relacionaron con su altura. Cuando supieron que el pie
era la sexta parte de la altura de un hombre, transfirieron esta relación a la
columna. Hicieron
la altura del fuste, incluido el capitel, seis veces mayor que la anchura de su
base. Así fue cómo la columna dóríca aportó a los edificios
las proporciones de un cuerpo varonil y su solidez y belleza».
VITRUBIO, 4, 1, 4-6
--Que el ojo del espectador pueda apreciar las cualidades de la construcción
Por ello deben eliminarse las alteraciones ópticas mediante correcciones en el edificio. Se trata de construir "imperfecto" para que se vea perfecto
